Cuando nos maquillamos lo que intentamos es quitarnos esas imperfecciones que el paso de la vida nos va dejando en la piel. Lo mismo hacen las empresas cuando presentan sus datos financieros a sus stakeholders: mostrar una mejor cara. Ésta es una de las conclusiones que se desprenden del estudio realizado conjuntamente por Estudio de Comunicación y Expansión que está siendo publicado estos días en el diario económico.
Sólo una cuarta parte de los inversores, accionistas, analistas nacionales e internacionales, agentes de bolsa, family office, gestores de fondos de inversión y empresas de capital riesgo entrevistados considera que las empresas sólo dicen la verdad y nada más que la verdad. Sin embargo, un 41 por ciento cree que las compañías se pasan con los polvos de maquillaje.
En Comunicación financiera debemos perseguir la máxima de la transparencia. Una empresa no vale por las acciones que dice va a realizar, sino por explicar cómo las va a llevar a cabo. Y aquí entra la Comunicación. Los departamentos financieros son los encargados de determinar cuáles son esas acciones y los expertos en Comunicación somos quienes las tenemos que explicar. Pero es que además, es lo que nos están demandando: según el estudio, casi el 70 por ciento de los entrevistados cree que, en tiempos de crisis, se debe informar más.
Los expertos financieros han hablado alto y claro: en estos momentos de incertidumbre económica, las empresas deben realizar un esfuerzo informativo para llegar a todos sus públicos y para proporcionar la mayor cantidad de información posible sobre asuntos realmente relevantes. La buena Comunicación de las empresas se está convirtiendo cada vez más en un activo dentro de la cuenta de resultados. Cuidémosla. Planifiquémosla. Tengámosla siempre en cuenta. Nuestros públicos objetivo nos lo agradecerán.
Tiene cada vez más sentido predicar a favor de esta transparencia, Esperanza. Primero, porque si algo llevó a la crisis fue, precisamente, la falta de transparencia; y segundo, porque los accionistas han ganado capacidad de acceso a la información y poder de influencia en la Red gracias a las herramientas de la web 2.0, que permiten a cualquiera hacer llegar su mensaje al mundo.
Por eso es crucial que quienes trabajamos en comunicación, convenzamos a los consejeros delegados de que ya NO pueden contar “milongas” y que la gente las crea a pies juntillas. Por mucho que lo intenten, la Red actual dejará cada vez más desnuda a la mentira (financiera o del tipo que sea).
Saludos!